Qué debes hacer si crees que tu hijo tiene un trastorno alimentario
Descubre si tu adolescente reúne los comportamientos habituales de la anorexia, la bulimia u otros TCA, y empieza a actuar
Tu hija se pesa varias veces al día, realiza ejercicio en exceso, se obsesiona con el número de calorías de los platos… Estos cambios aparentemente inocentes pueden ser indicio de los Trastornos de la Alimentación, enfermedades de salud mental con un gran impacto físico y emocional.
Si eres madre o padre de un adolescente, saber cómo acompañarlo, detectar las señales de alerta y fomentar una relación sana con la comida y el cuerpo es fundamental. La prevención no empieza en la consulta, sino en casa, con conversaciones sinceras y ejemplos cotidianos.
¿Qué son los TCA y por qué afectan tanto a los jóvenes?
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria, más conocidos por sus siglas TCA, son enfermedades mentales que alteran la forma en que una persona se relaciona con la comida y su propio cuerpo.
Dentro de los TCA se incluyen la anorexia, la bulimia o el trastorno por atracones. Comienzan con cambios en la actitud hacia la comida o el deporte, y afectan tanto a la mente como al organismo. Además, en muchos casos, tienen un fuerte impacto en el entorno familiar.
La doctora Fabiola Guerrero Alzola, especialista en Pediatría y sus Áreas Específicas del Hospital Ruber Internacional
, señala que "los TCA no se desencadenan por un solo factor, sino por una combinación de influencias genéticas, emocionales, sociales y culturales que actúan sobre la vulnerabilidad de la persona".
La prevención es esencial, y para ello, es necesario crear entornos donde el valor personal no se mida por el aspecto físico y donde hablar de alimentación o de emociones no sea un tema tabú.
Prevención de los TCA desde la infancia y la adolescencia
La prevención empieza mucho antes de la adolescencia. Para evitar la anorexia, la bulimia u otros trastornos alimentarios, es recomendable seguir las siguientes recomendaciones en la familia:
Enseñar a quererse sin condiciones
Los niños que aprenden a valorarse por lo que son y no por su cuerpo crecen con una autoestima más sólida y son menos vulnerables a desarrollar anorexia u otros TCA. La doctora hace hincapié en que es vital que los jóvenes comprendan que su valor no está ligado a su aspecto o a su peso.
Una de las claves para fomentar una imagen corporal positiva desde pequeños es celebrar sus habilidades, esfuerzos o pasiones, y no hacer comentarios sobre el peso o el aspecto estético. De esta manera conseguiremos disminuir la presión sobre la apariencia física.
Para lograrlo, hay que optar por frases como "me gusta verte disfrutar del deporte" o "es maravilloso ver cómo te apasiona lo que haces", que son mucho más poderosas que cualquier elogio sobre la delgadez.
Usar las redes sociales con pensamiento crítico
Instagram o TikTok pueden convertirse en espejos distorsionados. La exposición diaria a cuerpos "perfectos" e imágenes retocadas puede dañar la autoestima de los adolescentes.
"Muchos adolescentes comparan constantemente su cuerpo con los que ven en redes sociales, sin darse cuenta de que esas imágenes están retocadas o son poco realistas", advierte la doctora. Precisamente, cuando intentan alcanzar estos estereotipos virtuales, pueden caer en dietas muy estrictas o deportes extremos.
Frente a las redes sociales, lo importante en casa es ayudarles a que sean críticos con lo que se muestra en sus redes sociales favoritas. Para lograrlo, habla con tus hijos sobre lo que ven y explícales que la salud y el bienestar valen más que los filtros o los "me gusta".

Educar en una alimentación flexible y libre de culpas
Una buena relación con la comida no se basa en prohibir, sino en equilibrar y disfrutar. "Todos los alimentos pueden formar parte de una dieta saludable", explica la doctora Guerrero.
Otros aspectos clave son no sentirse culpables por comer y evitar las restricciones exageradas. En este sentido, hay que dejar fuera frases como "eso engorda" o "te pasaste con el postre". En lugar de ello, es mejor transmitir la idea de que todos los alimentos nos aportan algo, lo vital es comer equilibrado y sentirse bien.
Además, las comidas y cenas juntos en familia también protegen contra los TCA, ya que fomentan la comunicación, el ejemplo y los hábitos saludables.
Promover el deporte por bienestar, no por apariencia
El ejercicio físico debe ser una fuente de energía y una herramienta para mejorar el ánimo. "El deporte tiene que estar ligado al bienestar, no a la obligación de quemar calorías o compensar lo que se ha comido", recuerda la especialista.
Anima a tus hijos a encontrar una actividad que disfruten, sin presiones sobre el cuerpo. Cuando el movimiento se asocia con diversión y bienestar, el riesgo de desarrollar un trastorno de la alimentación disminuye notablemente. ¡Y aumenta la autoestima!
¿Sospechas que tu hijo tiene una mala relación con la comida?
Los Trastornos de Conducta Alimentaria suelen comenzar de forma silenciosa. La doctora subraya que "hablar abiertamente y de manera comprensiva es esencial para prevenir que los síntomas se agraven".
Hay que prestar atención a ciertas actitudes o comportamientos que pueden alertar de un TCA como anorexia, bulimia o trastorno por atracones. Puedes empezar a preocuparte si:
- Cuenta calorías de los alimentos de manera obsesiva
- Realiza dietas restrictivas o ayunos prolongados
- Practica deporte excesivo
- Se aísla y evita comer en familia
- Se enfada, tiene cambios de humor y le preocupan demasiado la comida y la dieta
- Utiliza la comida para aliviar emociones (culpa, tristeza o ansiedad)
Ante estos signos de alarma de un posible TCA, lo más conveniente es acudir a consulta. Abre un diálogo sereno, sin juzgar, escucha y busca ayuda profesional.
La familia como espacio de confianza frente a los TCA
Muchos adolescentes no expresan sus inseguridades por miedo a ser incomprendidos o juzgados. Aquí el papel de los padres consiste en ofrecer un ambiente agradable en el que los jóvenes puedan mantener conversaciones naturales sobre autoestima, redes sociales o alimentación.
Puedes iniciar el diálogo con preguntas sencillas como "¿has visto cómo en redes a veces se exagera con las dietas o los cuerpos perfectos?", y a continuación, añadir que lo fundamental es sentirse bien consigo mismo, sin tener en cuenta los estándares estéticos. Sobre todo escúchalos sin juzgar.
Cuándo debes pedir ayuda en los Trastornos de la Alimentación
La anorexia, la bulimia o el trastorno alimentario compulsivo son tratados en la consulta de Psicología Clínica. Ahora, además, es posible realizar el tratamiento del trastorno alimentario infantil de forma online
, sin desplazamientos, desde la comodidad de casa.
La doctora recuerda que "la intervención temprana es clave para detener el avance del trastorno y mejorar las probabilidades de recuperación". Por lo tanto, si observas comportamientos inusuales, es conveniente acudir a los especialistas lo antes posible.
El diagnóstico requiere una evaluación integral, que incluye historia clínica, exploración física, valoración psicológica y pruebas como análisis de sangre, densitometría ósea o electrocardiograma. Cuanto antes se actúe, mejor es el pronóstico físico y emocional.

Orientador de salud personal
¿Necesitas más información sobre esta prueba o tratamiento? Tengas o no seguro médico, nuestros equipo de expertos de Quirónsalud te ayudarán de forma gratuita.
© 2025 Quirónsalud - Todos los derechos reservados
















