12 reglas para evitar comer en exceso en el chiringuito

En verano no es necesario que te quedes en casa para comer o cenar sano. Puedes seguir disfrutando del chiringuito de la playa o de la terraza del nuevo restaurante que quieres visitar. La clave para no subir de peso, y seguir cuidando tu alimentación, está en tomar decisiones saludables.

Luis Castrillo Navarro, especialista en Endocrinología y Nutrición de los centros médicos Quirónsalud Tres Cantos y Quirónsalud Valdebebas, nos explica que "en realidad, puede ser tan saludable comer o cenar en época de vacaciones como hacerlo en casa, haciendo una buena elección de lo que vamos a comer y disminuyendo la frecuencia de los excesos".

¿Quieres seguir cuidando tu dieta en vacaciones? Aquí te ofrecemos las 12 mejores recomendaciones para no subir de peso en verano, estés donde estés.

12 reglas para no comer en exceso en verano

Sigue estos consejos prácticos que te ayudarán a comer más saludable en restaurantes y chiringuitos:

1. Aumenta el consumo de agua. Durante el día, es muy importante mantenerse bien hidratado para el buen funcionamiento del organismo. Para lograrlo, puedes incrementar la ingesta de agua, así como de frutas y hortalizas en forma de sopas frías como el gazpacho. El especialista también sugiere otra forma de hidratarse añadiendo al agua trozos de fruta cortada, proporcionando así un sabor especial.
2. Elige fruta como tentempié. Es el mejor aperitivo para la mitad de la mañana o de la tarde, e incluso como postre. Contiene vitaminas y minerales fundamentales para el organismo, aporta hidratación y resultan deliciosas. Además, es muy sencillo convertirlas en helados y refrescos saludables.
3. Consejos para evitar comer en exceso en vacacionesEscoge platos sencillos. A la hora de elegir entre los platos del menú, prioriza los que están elaborados de forma más sencilla, por ejemplo, preparados al vapor, la plancha o en papillote. Otra recomendación para no engordar en verano es cuidar el aliño de las ensaladas. El especialista recomienda "emplear el aceite de oliva o el vinagre y evitar el uso de salsas ya preparadas".
4. Cuida las cantidades. Evita hacer comidas demasiado copiosas. Es aconsejable poner atención a la cantidad de comida que vas a consumir. En este sentido, el experto nos explica que "se deberían controlar las cantidades de alimentos que, aun siendo saludables, aportan más calorías para no tomar un exceso de los mismos, como frutos secos, legumbres, pasta o arroz".
5. Puedes elegir arroz o fideuá. Es el plato estrella de los chiringuitos de la playa, y lo cierto es que puede ser una opción perfecta si escoges uno que contenga verdura y carne o pescado en pequeñas porciones. También lo puedes completar con una ensalada de acompañamiento, y de postre una pieza de fruta.
6. Incluye una ración diaria de verdura cruda. Castrillo nos recomienda consumir las verduras crudas al menos una vez al día, "ya que es la mejor forma de aprovechar todas sus vitaminas y minerales".
7. Bebe menos refrescos. Con el calor las bebidas azucaradas pueden resultar muy apetecibles. Sin embargo, aportan un alto contenido de azúcar y de calorías que nos impiden mantener el peso en vacaciones, y, además, no son el mejor líquido para cuidar la hidratación. Por eso, es recomendable que el agua sea la primera bebida que escojas para calmar la sed. Pero ¿qué pasa si te apetece beber algo diferente en el chiringuito de la playa? Entonces puedes oportar por alternativas como limonadas alcalinas caseras o aguas saborizadas con trozos de fruta como nos propone nuestro especialista.
8. Evita abusar de cervezas, tinto de verano o sangría. Son las bebidas más populares en las terrazas y chiringuitos. Aunque se trata de bebidas alcohólicas de baja graduación, es recomendable consumirlas con moderación. El especialista subraya que "la mejor forma para combatir el calor y no deshidratarnos es el agua".
9. Limita el consumo de alimentos ricos en calorías, azúcares y grasas saturadas. Aunque vayas a comer en el chiringuito de la playa, un restaurante o un bar, intenta que estos alimentos altos en calorías, azúcares y grasas saturadas sean de consumo ocasional y, en su lugar, da prioridad a otros más saludables y nutritivos.
10. Evita comer helado o postres dulces todos los días. Es preferible consumirlos de forma ocasional. Al respecto, el experto recuerda que "no son alimentos fundamentales ni esenciales para una alimentación saludable, es decir, no deben de formar parte de nuestra dieta diaria". En su lugar puedes escoger frutas y postres lácteos como yogur natural, kéfir o cuajada, que pueden ser tentempiés o el broche final de la comida.
11. Pon atención a alimentos que pueden estropearse por el calor. El riesgo de sufrir una intoxicación alimentaria puede aumentar en verano a causa de las altas temperaturas, por lo que es necesario conservar y manipular los platos de forma correcta. Sobre esto, Castrillo aconseja tener especial cuidado con las mayonesas caseras, tortillas poco cuajadas o el pescado crudo o poco cocinado.
12. Muévete y ¡disfruta del buen clima! El ejercicio físico es un aliado para la pérdida de peso, y además nos ayuda a mantenernos fuertes y saludables. Por todo eso, el experto nos anima a incrementar la actividad física, pero siempre evitando las horas centrales de calor.

¡Disfruta de un verano saludable!